Hay temas que todos conocemos pero quizá nunca nos detenemos a saber si lo estamos haciendo bien. Por increíble que parezca, así pasa con respirar… algo que a pesar de ser cotidiano suele hacerse mal. Y otro ejemplo es al evacuar.
¿Sabías que toda la vida has estado evacuando del modo incorrecto? Resulta que, durante generaciones, hemos utilizado una postura que podría perjudicar la salud. ¡Así como lo lees!
Y entonces ¿Qué hacer? ¿Cuál es esa posición que podría ayudar a evacuar mejor y protegernos? Te la mostramos a continuación, así como todos sus beneficios.
Este es el error que cometes al evacuar
El cuerpo humano es una maquinaria perfecta, resultado de años de adaptación. Cuando por accidente nos cortamos la piel, se encarga de cerrar la herida para protegernos. Cuando nos fracturamos, se toma el tiempo para soldar la ruptura. Y cuando comemos, toma los nutrientes para la vida y desecha el resto.
Eso ocurre al hacer nuestras necesidades. Y para lograrlo, el cuerpo fue refinando la posición perfecta: en cuclillas, algo que a la humanidad le tomó unos 50 mil años de adaptación. Sin embargo, desde hace 170 años, con la Revolución Industrial, se fue promoviendo masivamente el uso del retrete.
De esta manera, las personas dejaron de utilizar la postura natural de colocarse a un ángulo de 30 grados de las piernas respecto al torso. Y con el inodoro, adoptaron la posición de 90 grados (sentados).
¿El resultado? Generaciones y generaciones de personas que vienen haciendo uso incorrecto de una postura que al cuerpo humano le tomó miles de años depurar.
¿Sabes cuáles son las consecuencias?
Lo anterior va más allá de tener una posición más cómoda para evacuar. Ciertamente, es la postura a la que el ser humano moderno se ha acostumbrado; pero no por eso sería la correcta.
El cuerpo cuenta con un dispositivo capaz de contener los desechos cuando estamos de pie o sentados. Se llama ‘músculo puborrectal’.
Eso quiere decir que, al estar sentados, ese músculo estaría cumpliendo su función de bloquear la salida. Entonces, al evacuar sentados, como ocurre al usar el inodoro, la persona estaría forzando su organismo.
Lo anterior traería algunas consecuencias para su salud.
- Congestión intestinal.
- Evacuaciones incompletas.
- Estreñimiento.
- Hemorroides.
- Apendicitis.
- Cáncer de colon.
Soluciona tus problemas al ir de cuerpo
Los expertos en el tema han sugerido una vuelta a los orígenes. Es decir, permitir que el cuerpo haga lo que aprendió a perfeccionar durante tantos miles de años: en cuclillas.
Beneficios de evacuar en cuclillas:
- El músculo puborrectal se relaja completamente.
- Vaciado del intestino de manera suave y completa.
- Evitar problemas intestinales.
- Evitar el estancamiento fecal.
- Se reduce la acumulación de toxinas en el tracto intestinal.
De hecho, en varias sociedades no occidentales, las personas se sientan en cuclillas para evacuar, lo cual podría explicar la buena salud de sus habitantes. Tan es una posición aprendida por el cuerpo humano, que los bebés la realizan instintivamente al defecar.
Pero no por ello tendrías que deshacerte de tu actual inodoro e implementar todo un nuevo sistema en casa.
Todo tiene solución: Conoce al Taburete para baño TheraToilet
TheraToilet es un pequeño banco especialmente diseñado para colocarse bajo el inodoro y encima colocar las plantas de los pies. De esta manera, puede emularse la manera natural en la que el cuerpo evacúa, a un ángulo de 30 grados; es decir, a una altura aproximada de 19 centímetros.
Retrete, inodoro, excusado, WC, sanitario, taza, water... no importa cómo le digas el taburete para baño TheraToilet llegó para solucionar las fallas de diseño.
TheraToilet es un banco de 19 centímetros de altura, con gomas en la base que lo mantienen firme y una cubierta antiderrapante. Y para quienes gustan de utilizar su teléfono estando en el baño, cuenta con una ranura multiusos ¿Quieres conocer el taburete para baño TheraToilet? Entra aquí.
Ayuda a tu salud volviendo a los orígenes
Como puedes ver, por generaciones se nos ha enseñado un modo equivocado para la hora de ir al baño. Pero el verdadero problema está en las consecuencias que eso podría traer para nuestra salud.
Las complicaciones irían desde estreñimiento hasta cáncer de color. Pero con la posición correcta, los beneficios van desde un correcto vaciado hasta la protección de órganos internos.
Vale la pena el cambio y, por fortuna, la solución es sencilla, rápida y cómoda. Un pequeño ajuste y todo puede mejorar.