¿Estás cargado de tensiones y necesitas relajarte de una manera rápida, económica y sencilla? Descuida, hay varias formas en las que puedes descansar y convertir tu casa en un pequeño spa, sin necesidad de gastar mucho dinero ni de contratar los servicios de un profesional.
Es cierto que un relajante baño de jacuzzi, o una sesión de masajes con vapor y rocas volcánicas podrían dejarte como nuevo tras una rutina agotadora en el trabajo. O tras pasar varias horas acondicionando el hogar para la familia, o estudiando para un examen.
Pero no te preocupes, sigue los consejos que te dejaremos a continuación, pues te ayudarán a aliviar no solo el estrés, sino también a sentirte mejor con tu cuerpo, con tu espalda, cuello, y con todas las áreas que puedan verse afectadas por la tensión.
¿Cómo descansar en casa?
Hay actividades que puedes hacer, y hábitos que puedes comenzar a cambiar para poder dedicar diariamente algo de tiempo a tu relajación física y mental. Con solo 20 minutos al día podrás mejorar significativamente tu calidad de vida.
1. Haz de tu casa tu refugio
Desde que salimos de casa por la mañana, nuestro deseo más grande es el estar de vuelta. Por lo que, al regresar, debemos intentar dejar todos los problemas fuera y convertir nuestro hogar en un refugio “anti-realidad”.
Si relajarse en casa es el plan, quítate los zapatos, ponte ropa cómoda, escucha algo de música, come algo que te guste, e, intenta disfrutar de sentirte confortable haciendo lo que más te gusta. Dedícate el tiempo que puedas, pero no dejes de hacerlo diariamente.
Existen accesorios especialmente diseñados para estar más relajados en casa mientras hacemos las actividades que más nos gustan, como ver televisión, jugar videojuegos, leer un libro o simplemente, pasar el rato en familia.
2. Utilizar pantallas antes de acostarte NO te hará descansar
Estimular nuestros sentidos con contenidos visuales, ya sea a través del televisor o de la pantalla del celular, tablet o computadora, tiene efectos negativos en la calidad de nuestro descanso.
Independientemente de la luz azul de las pantallas, que afecta la secreción de melatonina (hormona indispensable para regular el sueño), estimularnos a través de pantallas nos hará trasladar todo lo que hayamos visto a nuestros sueños y eso impactará en nuestros nervios y nos hará muy difícil el descanso y la relajación.
Si te gusta consumir contenidos en cualquiera de tus dispositivos para relajar tu mente durante el día, hazlo, pero procura cambiar el hábito y suspende el uso de dispositivos al menos una hora antes de dormir.
De más está decir, que intentes mantener una buena postura mientras ves televisión o navegas en las redes. Cuida tus cervicales, tu cuello y tu espalda proveyéndote de aquellos accesorios correctos para no hacerte daño.
3. Haz de tu baño nocturno un ritual
Luego de haber completado todas tus actividades del día, darte un baño caliente antes de acostarte es una buena opción para tener tus minutos diarios de relajación.
Para que nadie interrumpa y lo sientas realmente un momento de spa para ti, puedes ser el último en usar el cuarto de baño. Pero eso sí, procura convertirlo en tu ritual, y si no puedes todos los días, al menos hazlo una o dos veces por semana.
Si tienes tina puedes llenarla y permanecer dentro durante algunos minutos. Para incrementar la experiencia relajante, utiliza aceites y jabones aromáticos y date un buen masaje en la zona de los hombros y cuello. Si tienes ducha, es lo mismo, no te prives de un buen baño para recargar energías.
4. El día tiene 24 horas, hazte unos minutos solo para ti
Aunque no lo creas, una de las mejores formas de descansar es estar a solas. Y no es egoísmo, ni ser poco amistosos. Simplemente, que para poder despejarnos necesitamos no estar rodeados de gente. Y este es el motivo más frecuente por el que mucha gente opta por vacacionar en sitios desolados o realiza deportes en solitario.
Estar solos nos da espacio para reflexionar, y también nos da un tiempo para no hacer nada en particular o para enfocarnos en algo 100% sin que exista otra meta más que nosotros mismos. Y esto no debería darnos culpa ni ansiedad.
¿Recuerdas cuando dijimos más arriba que los problemas hay que dejarlos fuera de casa al llegar? Esto es exactamente lo mismo. Cuando hacemos una actividad para relajarnos, debemos internar enforcarnos solo en eso.
Hacer NADA, ¿la clave para estar relajado en casa?
El día tiene 24 horas, de las cuales muchas de ellas las dedicas en hacer cosas para los demás. Tómate un tiempo para ti, para descansar en casa y para relajarte. Tener la mente despejada también es parte de la salud y de la felicidad.
¿Qué te han parecido estos consejos? Has visto que no es tan difícil y que no se necesita gastar dinero en un spa para descansar en casa; sino que simplemente se trata de estar con uno mismo y hacer lo que nos gusta y relaja.
Recuerda, dedícate unos minutos al día y no te sientas mal por no estar haciendo cosas “más productivas”. No hay nada más importante y valioso que la salud, y todas las personas que te quieren y dependen de ti, estarán aún mejor si tú estás bien para ellos.
Relajarse y descansar es simplemente no estar haciendo nada, pero a la vez implica estar haciendo algo muy importante: permitir que la vida suceda.